La Administración Distrital se enfrenta a un desafío crucial: recuperar la confianza de la ciudadanía en las instituciones. Según la Encuesta de Cultura Política del DANE del año 2023, cinco de cada diez bogotanos consideran que el gobierno local es corrupto o muy corrupto. Este dato no es un número más, refleja la preocupante percepción negativa que tienen los ciudadanos sobre la gestión pública. Aunque la encuesta realizó una evaluación de la administración distrital anterior, el gobierno distrital debe recuperar la confianza a través de acciones claras y concretas.
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Las principales preocupaciones de los bogotanos giran en torno a la movilidad, la inseguridad y, por supuesto, la corrupción. Así lo demuestran también los resultados de la encuesta Polimétrica realizada en junio de este año.
Ante este panorama, surge una pregunta fundamental: ¿son suficientes las medidas que se están tomando desde el gobierno distrital y nacional para recuperar la confianza de la ciudadanía?
Desde la bancada del Partido Político MIRA, hemos abordado este tema en profundidad con múltiples acciones y propuestas, entre las cuales se resalta el debate de control político realizado en el Concejo de Bogotá el pasado 09 de agosto, en relación con las políticas para la recuperación de la confianza; de igual forma, la discusión del presupuesto general de la Nación para el 2025 en el Congreso de la República; en cuyo marco, el presidente y senador del Partido MIRA, Manuel Virgüez Piraquive, reiteró la necesidad de que la transparencia, la austeridad y un gasto eficiente sean los pilares de una política pública sostenible, una política de Estado que trascienda periodos de gobierno y tendencias políticas. Bajo este enfoque, el senador Virgüez dejó clara la necesidad que la lucha contra la corrupción no se limite a promesas vacías, sino que se apliquen de manera firme y sin distinción, con una responsabilidad compartida por todos los niveles de gobierno y fuerzas políticas. Solo así erradicaremos estas prácticas y cumpliremos con las expectativas de los ciudadanos.
Ahora bien, en el ámbito de la construcción y aprobación del Plan Distrital de Desarrollo 2024-2027 “Bogotá Camina Segura”, se formularon acciones para luchar contra la corrupción y mejorar la transparencia en la gestión pública; específicamente, contenidas en el objetivo estratégico “Bogotá Confía en su Gobierno”, donde se plasmaron varias metas relacionadas con la recuperación de la confianza ciudadana. No obstante, más allá de lo planteado como intención, la ciudadanía requiere acciones inmediatas que reduzcan la percepción negativa en torno a la transparencia y la corrupción. El Índice de Transparencia de Bogotá, elaborado por Transparencia por Colombia, señala que varias entidades distritales presentan niveles de riesgo medio de corrupción, entre ellas la Secretaría de Educación, la Contraloría de Bogotá y el Instituto Distrital de Recreación y Deporte -IDRD. Aunque no hay entidades catalogadas en los niveles más altos de riesgo, el hecho de que 12 entidades distritales se encuentren en niveles de riesgo medio de corrupción, es una alerta que no podemos ignorar.
Es importante resaltar que en este año se han implementado diversas acciones orientadas hacia la transparencia, como los pactos por la transparencia y el Decreto 062 de 2024, que introdujo medidas de austeridad en el Distrito Capital. También se ha mantenido la Semana de la Transparencia, los sistemas de alertas tempranas para prevenir hechos de corrupción y plataformas como “Bogotá Te Escucha”, que promueven la participación ciudadana a través de PQRSD (peticiones, quejas, reclamos, sugerencias y denuncias).
El reto central se enfoca en cómo la aplicación de la política pública de transparencia puede transformar realmente la percepción de los ciudadanos. La confianza va más allá del cumplimiento de estándares de transparencia o de los índices. Se trata de hacer tangibles estas acciones, para que los ciudadanos vean y sientan los resultados en su vida diaria, reflejados en el cumplimiento de las obras y el acceso oportuno y de calidad a los servicios como educación, salud, vivienda y servicios públicos, entre otros.
Recuperar la confianza ciudadana en Bogotá y en Colombia es una prioridad y no es tarea fácil. Los esfuerzos deben reflejarse claramente en la vida cotidiana de los ciudadanos. Solamente así, mediante una gestión más cercana, empática, respetuosa, ética y transparente, avanzaremos hacia un gobierno que gane día a día la confianza de sus ciudadanos.